Hola Pau, no lo ví todo al partido. Nada de eso. No tengo tiempo para cosas nímias. Solamente vi unos 95 minutos y grité como un chancho que lo ataron con alambre. Me perdí el 5to gol, porque me llamaron (siete veces hoy) de la Universidad.
Estoy contento claro. Pero el equipo me pareció apático, desmoralizado, desconcentrado. Se veía claramento que el Cucho Cambiasso estaba asustado. No viste la mirada de terror que tenía cuando vino de atrás como una tromba y metió el terrible taponazo del segundo gol?
Peor Saviola que, aterrorizado por los dos metros del lateral serbio, le sacó la pelota como a un niño desde su poderoso metro y veinte, aprovechándose de sus aventajados 40 kilos, e hizo un perfecto pase de gol.
Otro que me pareció apocado fue Mascherano, devolviendo todo. Creo que fueron justas las quejas del Ratón Ayala, porque Mascherano no lo dejó jugar. La pelota no llegaba casi nunca a él. La paraba siempre Masche antes, y se la devolvía a Riquelme, generalmente. Una total falta de solidaridad con Heinze y especialmente con Ayala, que casi no la tocó.
Burdisso también parecía soñolento. Desarmaba al rival con facilidad y devolvía a Sorín, y se quedaba ahí mismo, bostezando. Un aburrimiento.
Sorín, otro abúlico, corriendo como un motor de arriba a abajo. ¿Qué es eso? ¿Será que él crée que jugar al futbol es desempeñarse como lateral izquierdo, mediocampista y atacante, todo al mismo tiempo? Alguien tiene que despejar los errores de ese muchacho. Y revisar sus pulmones, porque no parece humano.
Es verdad que los tipos esos eran menos peligrosos que MÉDICOS SIN FRONTERAS. Tenían menos agresividad que la CRUZ ROJA INTERNACIONAL, pero tenían craques extraordinarios como Milosevic (no sé si lo reconociste, era ese salame que tocó tres o cuatro veces la pelota y fue tan intrascendente que lo sacaron, aún siendo el capitán) o el extraordinario Stankovic (era uno que parecía un muerto, y que Sorin lo pasaba de ida y vuelta, como si fuera un poste). Un equipo fantástico, como bien señaló la prensa internacional, especialmente la europea.
Riquelme, en vez de jugar, se dedicaba a dar clase, mostrando como se puede ser creativo, dar pases perfectos de veinte metros, inventar jugadas, dejar a los compañeros en la cara del arquero adversario, sin siquiera despeinarse. Un horror. Pachorriento, fiaca, solo la agarraba, gambeteaba unos dos o tres, la aguantaba, y cuando los compañeros se acomodaban, recién ahí sacaba un pase milimétrico en profundidad. Muy poco para ser la manija de un equipo. No se puede comparar con los jugadores brasileros, "los reyes del firulete al pedo", que juegan como si fueran del Circo Sarrasani, haciendo un montón de acrobacias inútiles y de malabarismo que no llevan a nada. Y a esas pelotudeces, los inteligentísimos periodistas capitalistas, contratados por la Nike, le llaman "jogo bonito".
Maxi Rodriguez parecía estar en otra cosa. Distraído, hizo unos dos goles creo, pero esas son casualidades. Igual que los pases de taquito de Crespo, un alarde de habilidad y dinámica, sin importancia.
Muy bueno lo de Lucho. Excelente. Espero que no regrese más ese gallináceo y deje jugar a los hombres. Ese cagonazo tiene que dedicarse al tenis. O, inclusive, a las letras, porque las plumas ya las tiene.
Y que decir de las agallas de ese rústico Tevez, que es capáz de entrar atropellando a tipos de dos metros, gambeteando de a dos, y pateando como una mula, con exacta dirección. ¿Donde ya se vió una cosa de esas? ¿Esa elementalidad? ¿Se crée que está en Corinthians ese pibe? ¿Se crée que así va a resultar ser elegido el mejor jugador del Brasil del 2005? Eh? No me gustó nada. Y el cáos final fue cuando entró ese chico Messi (que los brasileros inventaron que, en realidad, salió muy chico de Argentina, como amateur). Es evidente que se hizo en Europa, especialmente le hicieron los güevos, el arranque, los cambios de velocidad, la facilidad para encarar y gambetear en plena carrera, y el disparo preciso en diagonal. ¡Lamentable!
El Hombre Peker hizo los cambios justos en los momentos precisos. Plantó un equipo (con una determinada estratégia y diversas tácticas) en el primer tiempo, y otro equipo (con las consecuentes mudanzas estratégicas y tácticas, correlativas con las habilidades de sus jugadores) en el segundo, desconcertando a media humanidad (la otra mitad está en cana, campos de concentración o debajo de los bombardeos norteamericanos). No sé si se puede llamar "director técnico" a un individuo así.
Como ves Pau, me pareció deplorable el desempeño de nuestra selección. Ningún equipo dió una muestra de fútbol como la nuestra, hasta ahora. Ni Alemania, Francia, Italia, Inglaterra, Holanda, o Brasil están a éste nivel. Si continúa jugando de ésta manera, Argentina va a dar que hablar en ésta copa. Deprimido, me voy a comer algo que mis tripas se chocan entre ellas. Pero debe ser DE ORGULLO!!! Un abrazo
(mail recibido tras la victoria de Argentina 6 a 0 a Serbia y Montenegro, por mi padre, Profesor Néstor Candi)
